Luis Rubiales, del nuevo paso en el banco por el beso que no permitió a Jenni Hermoso | Deportado

Luis Rubiales pasa a situarse a un paso del banquillo de los imputados. El partido de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge devolvió como apoyo del jurado al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) por el beso no permitido a la jugadora Jennifer Hermoso en la final del pasado mundial de fútbol. celebrado el 20 de agosto en Sydney (Australia). La decisión del magistrado de presentar de una vez declaración como testigo, el paso del 2 de febrero, a la actual seleccionadora, Montse Tomé, tal y como había ordenado días ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que dejó sin efecto la auto previo del magistrado con lo que debía finalizar la instrucción del caso. De Jorge reitera ahora los argumentos ya expresados ​​para sustentar que si se juzga a Rubiales, entre ellos la existencia de “indicios sólidos” según los cuales el beso del jugador “no estaba permitido y fue una iniciativa unilateral y sorprendente” de la máxima directiva del Real Madrid fútbol americano. La denuncia Fiscal acusó a Rubiales de un presunto delito de agresión sexual y otros delitos.

El partido también ofrece la novedad que, junto al expresidente de la RFEF, ve en el banquillo al director deportivo de la selección masculina, Albert Luque; el entrenador de la selección femenina Jorge Vilda y el exgerente de marketing de la Federación Rubén Rivera. A todos ellos, presuntamente participando en una serie de maniobras para hacer frente a que Hermoso “doblara la voluntad” y “lograra que tuviera acceso a capturar un vídeo en el que decía que el beso había tenido consentimiento”. “La presión ante la jugadora le generó una situación de ansiedad y estrés intenso”, afirma el entrenador. Una vez firmada la nueva resolución judicial ―que puede ser recurrida―, la Fiscalía y las acusaciones personadas tenderán 10 días para solicitar la apertura de jugo oral y, en este caso, formular una acusación escrita.

La decisión del partido era esperanza después de que el pasado 25 de Nero dictara un auto con el mismo sentimiento. Durante cuatro meses de investigaciones, el magistrado ya ha concluido que el beso de Rubiales al futbolista no contó con el consentimiento y que personas del “círculo cercano” al expresidente de la federación intentaron presidir al jugador cuando estalló el escándalo. interrumpido. En ese momento, el magistrado recibió la petición de la defensa de Vilda de tomar declarando a Tomé que era su mano derecha dentro del equipo técnico antes de reemplazarlo, por considerar que ese testimonio era inútil para el caso. Vilda recurrió a esa decisión del juego y la Audiencia Nacional dejó sin efecto el auto y ordenó practicar diligencia.

Esta declaración la hizo el pasado 2 de febrero y en ella la actual profesora de la selección femenina confirmó que si no la hubiera llamado, Hermoso habría quedado fuera de la lista de convocaciones cuando lo reemplazó como seleccionador, Vilda se habría apuntado a participar en la reunión de la RFEF del 25 de agosto, está claro que ella no lo pidió. En este acto, los asistentes saludaron y ovacionaron a Rubiales, quien presumiblemente tuvo que presentar su renuncia ese día. Al final, lo mantuve en mi haber hasta que fue suspendido (y posteriormente castigado) por la FIFA, que lo inhabilitó durante tres años. Una vez declarado a Tomé, el juez ha dicho ahora el auto con lo que quiere dar para finalizar la investigación y propone un nuevo juicio a los cuatro imputados.

El coche del magistrado es, en realidad, un elenco de De Nerón. Así resulta que en el relato de quienes, durante el saludo protocolar previo a la recepción del trofeo de campeones del mundo, Rubiales “sujetó la cabeza del jugador con ambas manos, a la altura de los ojos, y en forma De manera sorprendente y desesperada vertió un trago en los labios de la jugadora, quien no se dio cuenta de la intención del querrellado de beberlo en sus labios ni le dio su consentimiento”. El magistrado señala que el jugador, “desconcertado y sorprendido”, no tuvo tiempo de reaccionar y que tuvo que “seguir siendo importante para ella en el primer momento y seguir celebrando el triunfo histórico de la selección” y el paso de las horas “fue Al dar paso de largo al mal y al sentimiento de ser ofendido.”

Además, a su regreso a España, el actual presidente de la RFEF pretendía que Hermoso accediera “a realizar un acto público, realizado conjuntamente con él, manifestando que el beso había consentido, lo que el jugador negó, expresando su malestar”. Rubiales supuestamente le dijo a Vilda, entonces seleccionadora, que habló con la futbolista “para convencerla de participar en la realización de un vídeo con el contenido falso”. También lo hizo Vilda, que avisó a la familia de Hermoso de que, en caso de no hacerlo, “en negativo tendrá consecuencias negativas para ella y sufrirá un perjuicio en su carrera profesional como futbolista”.

Una vez en España, el partido consideró que Rivera, jefe de marketing de la RFEF y también imputado, también le dijo a Hermoso “de manera reiterada y persistente” que participaba en el vídeo en exculpación de Rubiales, presión sobre el que presuntamente participó después para El barrio del implicado, Albert Luque. Llevó a una persona al hotel donde se alojó el adolescente durante un viaje para obligarlos a hablar con él. Esta directiva también pretende convencer a un amigo del futbolista para convencerera. Ante su respuesta negativa, ésta “envió un mensaje de whatsapp a la amiga de Jennifer, insistiendo en su pedido de ayuda para justificar la conducta de Luis Rubiales manifestando su compromiso, acusando a una persona enferma, deseando encontrarse muy solo en la vida y anunciándolo”. que se alegrarán de lo que sucederá.” El magistrado concluye que los resultados de la investigación respaldan los cargos contra los cuatro sospechosos.

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