El Gobierno de Guatemala ha decidido impulsar de manera prioritaria el desarrollo de su infraestructura ferroviaria como parte fundamental de su estrategia para mejorar la conectividad interna y regional. En esta línea, las autoridades buscan consolidar un sistema moderno que articule las principales ciudades y puertos del país, al tiempo que se explora la posibilidad de integrarse al Tren Maya, el ambicioso proyecto ferroviario que México desarrolla en el sureste del país.
El proyecto denominado “Tren Rápido de Guatemala” tiene como objetivo unir los 22 departamentos del país, mejorando el transporte tanto de mercancías como de personas. Este plan, que incluye la colaboración del sector privado, también busca conectarse con el Tren Maya de México mediante el puente que enlaza Tecún Umán con Ciudad Hidalgo, Chiapas. Esta iniciativa representa un esfuerzo por potenciar el comercio entre ambos países y facilitar la movilidad a través de la frontera, lo que traería significativos beneficios económicos y sociales para las dos naciones.
En paralelo, el Gobierno guatemalteco ha puesto en marcha un estudio de factibilidad en conjunto con expertos del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos (USACE). El análisis incluye la reactivación de unos 800 kilómetros de vías férreas existentes, la implementación de un sistema de tren ligero —denominado MetroRiel— para la Ciudad de Guatemala, y la evaluación de un trazado para trenes de carga que modernicen la logística nacional.
Este plan contempla la creación de corredores ferroviarios que mejoren el acceso a puertos clave, como Puerto Quetzal, y permitan agilizar el transporte de mercancías, disminuyendo costos y tiempos. Además, se apunta a facilitar el traslado de pasajeros en el área metropolitana con un sistema que conecte zonas como Centra Norte y Centra Sur, buscando reducir la congestión vehicular y fomentar una movilidad más sostenible.
Por otra parte, Guatemala ha comenzado diálogos con México y Belice para considerar la ampliación del Tren Maya hacia el área de Centroamérica. La presidenta de México ha expresado su intención de enlazar el sistema ferroviario con Guatemala y Belice, evitando áreas ecológicamente delicadas como la selva del Petén, y favoreciendo rutas que preserven el entorno natural.
Desde Guatemala, las autoridades del Ministerio de Turismo han destacado el potencial de esta conexión para impulsar el turismo regional y generar sinergias en la protección del patrimonio maya. Se proyecta que la vinculación ferroviaria fortalecerá el flujo de visitantes entre ambos países, dinamizando las economías locales y promoviendo un desarrollo turístico sostenible.
Las rutas de conexión potenciales evaluarían conexiones desde Chetumal o Tenosique en México con dirección a Belice, y después hacia Guatemala, pasando por municipios fronterizos que faciliten un tránsito sin obstáculos. El Gobierno de Guatemala ha enfatizado que la ejecución debe alinearse con rigurosos estándares ambientales y sociales, para evitar efectos adversos en las comunidades y sus ecosistemas.
Estas iniciativas forman parte de un plan regional más amplio que busca interconectar seis países de Centroamérica con México mediante corredores ferroviarios estratégicos. El objetivo es crear una red integrada que facilite el comercio, el transporte y la cooperación en infraestructura, generando desarrollo económico y mayor competitividad para la región.
En resumen, Guatemala está en un momento crucial para actualizar su infraestructura ferroviaria y establecerse como un punto logístico clave en Centroamérica. La iniciativa de unirse al Tren Maya y reactivar las rutas ferroviarias ya existentes busca fortalecer un sistema de transporte eficaz, sostenible y enfocado en el progreso regional.
La tarea actual consiste en progresar en la alineación técnica, financiera y política entre las naciones implicadas, asegurando la conservación del legado natural y cultural, y fomentando la implicación de la comunidad civil en la elaboración de estos proyectos de gran magnitud.